viernes, 26 de abril de 2013

Pensando en voz alta

Hay razones para pensar en una eventual barrida de San Antonio Spurs sobre Los Angeles Lakers. Los Spurs ganaron sus dos partidos en casa, jugando como suelen hacerlo y con Tim Duncan, Tony Parker y Emanuel Ginóbili en alto nivel. Mientras, los 'laguneros' además de extrañar a Kobe Bryant, se están quedando cortos de plantel. Steve Blake quedó descartado, por lesión, para el duelo de este viernes y la presencia de Steve Nash está en duda. Un signo para suponer que Mike D'Antoni está tirando la toalla: el miércoles, a seis minutos del final, sentó a los titulares y mandó a la pista a personajes tales como Jordan Hill, Darius Morris y Andrew Gudelock. El señor "Pringles" hace méritos para irse de pesca.

Después de perder los dos primeros juegos de visita, con un "buzzer beater" de Chris Paul para definir el segundo partido incluído, Memphis Grizzlies volvió a su arena y volvió a aplicar su tipo de baloncesto. Físico, de ritmo lento y rayando casi en la rusticidad. Zach Randolph y Marc Gasol volvieron a imponerse en los tableros (rebotes totales: MEM 45, LAC 33) y los 'osos' se metieron en la serie frente a Los Angeles Clippers. El año pasado protagonizaron un thriller de siete juegos, si vuelve a ocurrir algo similar ahora, podríamos estar en presencia de una nueva rivalidad en el oeste. El "otro" equipo de L.A. juega de forma vistosa, Memphis lleva un estilo ríspido. ¿Choque de estilos? Podría ser.

El ajuste que hizo Mark Jackson para suplir la baja de David Lee (fuera por el resto de los playoffs), fue alinear un quinteto más rápido. Puso a Jarrett Jack de titular junto a Stephen Curry y Klay Thompson en los puestos de base. ¿El resultado? 64.6% de tiros encestados -31 canastas convertidas por los tres jugadores citados- y un total de 131 puntos para nivelar la serie entre Golden State Warriors y Denver Nuggets. Corridas, pases, pantallas oportunas y buena elección de disparos. El experimento de Jackson, en su segundo año como head coach de los Warriors, avanza notoriamente y lleva la eliminatoria a casa, luego de sacar un triunfo como visitante. Nada mal para una franquicia que, en los últimos veinte años, sólo había clasificado a dos postemporadas de NBA.

Seamos serios. Miami Heat está entrenando con público en su serie ante Milwaukee Bucks. Los tres partidos disputados -todos ganados por Miami- han tenido dinámicas similares. Comienzos prometedores de los Bucks con lanzamientos de Brandon Jennings y Monta Ellis, hasta que los jugadores del Heat liquidan el juego a finales del tercer cuarto. ¿Algo nuevo que contar del campeón? Fuera de la producción de Lebron James, Dwyane Wade y Chris Bosh, es Chris Andersen quien merece una mención. Reconocido por su corte de pelo y sinfín de tatuajes, aporta haciendo el trabajo sucio. No por nada, promedia 6.5 rebotes en lo que va de serie y además, ha encestado 15 de 17 intentos al aro. El "Birdman" la está pasando bien en South Florida.

miércoles, 24 de abril de 2013

Celtics-Knicks: aciertos y ajustes

New York Knicks y Boston Celtics han sacado a relucir su histórica rivalidad, en los dos primeros duelos de la serie de playoffs de la NBA, disputados en Madison Square Garden. Juego físico, rozando lo ilegal, y causando dificultad al oponente para convertir canastas. Muy propio del baloncesto clásico del este, aunque algo carente de acciones colectivas.

En la antesala del inicio de la serie, se hablaba que una de las claves sería el desempeño de la ofensiva de los Knicks frente a la defensiva de los Celtics. Estos últimos, en cierta medida, tienen la capacidad de marcar las opciones de pase del equipo neoyorquino, pero en situaciones de uno contra uno, jugadores como Carmelo Anthony, J.R. Smith y Raymond Felton les sacan una enorme diferencia, debido a que pueden crear sus propios tiros. De hecho, Anthony; Smith y Felton han encestado 51 de las 64 canastas de New York en los dos partidos.

Del otro lado, el conjunto verde intenta reemplazar la ausencia del lesionado Rajon Rondo, con ataques repartidos, llevando el balón al poste o descargando para largos disparos de Jeff Green o Jason Terry. Lo malo, para ellos, es que su dinámica no les alcanza para más de tres cuartos. La edad de jugadores como Paul Pierce y Kevin Garnett, además de tener pocas variantes en la banca, les pasan la cuenta. Basta con ver su producción en segundas mitades: el sábado, convirtieron 25 puntos y anoche, 23 -récord negativo de la franquicia-.

Ambos equipos necesitan corregir diferentes aspectos para los próximos encuentros. Si bien New York lidera la serie 2-0, debe mejorar su ejecución ofensiva, sobre todo pasando el balón para encontrar mejores tiros. Aparte de Smith, los suplentes no han aportado mucho más. Boston, por su parte, requiere de mayor consistencia de jugadores como Terry y Courtney Lee para complementar lo que hacen Pierce y Garnett, aunque también sería bueno que K.G. no cometa faltas tan temprano. Anoche, en pleno primer cuarto, ya tenía dos y eso significa una considerable perdida para los C's, jugando cerca del aro.

martes, 16 de abril de 2013

NBA Retro: El adiós de Michael

En la noche del 16 de abril de 2003, el First Union Center de Philadelphia fue testigo del último partido en la carrera de Michael Jordan. Ésto no se asemejaba a los retiros de 1993 y 1999, que tuvieron posteriores retornos. Su majestad ya había cumplido 40 años y ya se había dado el lujo de jugar dos temporadas completas con Washington Wizards, equipo al que se había integrado originalmente para formar parte de su dirigencia, donde una de sus decisiones más recordadas (¿y cuestionadas?) fue la elección de Kwame Brown en la primera ronda del draft en 2001. Pero ese es otro asunto.

El hecho es que Jordan daba sus adiós definitivo de las canchas de la NBA. Durante las semanas previas, había recibido toda clase de reconocimientos, en su último partido en Madison Square Garden, en el homenaje de Pat Riley en Miami, retirando la # 23, a pesar que M.J. nunca jugó por el Heat y en su último juego en Washington, par de noches antes de la despedida.

El partido, que fue uno de los primeros transmitidos en alta definición en Estados Unidos, quedó sólo como una anécdota. Seguro muy pocos recuerdan que los Sixers ganaron aquel duelo, por 107-87, y su máximo anotador fue Allen Iverson, con 35 puntos. Y es posible, también, que muy pocos sepan que, en esa jornada, Jordan registró 15 unidades, cuatro rebotes y cuatro asistencias en 28 minutos disputados.

En verdad, eso no importaba. A falta de 2:20 para el final del juego, el director técnico de los Wizards, Doug Collins, ordenó una sustitución. Quien debía ir al banco era Jordan, y no iba a ingresar más a la pista. Los más de 21 mil espectadores presentes le brindaron una larga y calurosa ovación, mientras sus compañeros de equipo, así como también los jugadores de Philadelphia, lo despedían. Un tributo a la altura de la ocasión, a la altura de Michael.

Evidentemente, no era el mismo jugador que había encabezado a los Chicago Bulls en los seis campeonatos ganados en los 90's. Pero, de igual manera, fue un privilegio ver jugar a Jordan en esos años que estuvo con Washington. Siempre competitivo y con deseos de ganar, revolucionó el baloncesto y pasó a la historia como uno de los más grandes jugadores. Nunca está demás recordarlo, sobre todo, a diez años de su retiro definitivo.

lunes, 15 de abril de 2013

Sammy Sosa

Lejos, uno de los latinos más destacados que ha pasado por la Major League Baseball. Personalmente, uno de los primeros beisbolistas que vi fue el dominicano, con el uniforme de Chicago Cubs, equipo con el que jugó 13 temporadas y bateó 545 home runs.

Sigo recordando el home run derby del 2000, el cual fue ganado por Sosa dando una auténtica exhibición de bateo, sacando la pelota del parque de Atlanta una y otra vez, llegando a 26 cuadrangulares en esa noche. Todos y cada uno de ellos, cantados por la voz de Ernesto Jerez al grito de "Dígale que no a esa pelota".

Sobresalía en un equipo al que le costaba ganar, perseguido por una maldición de más de 100 años sin ganar campeonatos -tal como cuenta la historia que aparece aquí-. En 2003, justo cuando los Cubs parecían revertir su realidad, Sammy se vio envuelto en un escándalo desatado por un corcho que había en el bate que usó en un partido.

Era el único bate que estaba así, todos los demás estaban limpios. Pero desde ahí, la trayectoria de Sosa fue en declive hasta su último partido, que disputó en septiembre de 2007 con Texas Rangers, el conjunto con el que había iniciado su carrera en Ligas Mayores, 18 años atrás.

Igualmente, lo recuerdo como uno de los personajes por los que comencé a ver béisbol. Tal vez debido a la euforia que generaba su presencia en Wrigley Field, a sus home runs y a sus festejos por cada pelota que sacaba del terreno de juego.

Jardín derecho, camiseta #21, Samuel Kelvin Peralta Sosa.

martes, 9 de abril de 2013

Final colegial con ritmo profesional

El hecho: Louisville venció a Michigan por 82-76, y se tituló como nuevo campeón del básquetbol
universitario. De esa forma, consiguieron el tercer campeonato en su historia, sumándose a los obtenidos en 1980 y 1986, terminando con la segunda sequía más larga entre coronaciones -Kansas esperó 36 años entre un título y otro-.

La causa: Al igual que en la semifinal ante Wichita State, los Cardinals debieron remontar una desventaja de 12 puntos. Fundamental fue el aporte de Peyton Siva, quien encabezó a su equipo y convirtió 18 unidades, varias de ellas, atacando directo al aro, algo que Louisville hizo con mayor consistencia después del intermedio. De hecho, en la segunda mitad, los Card's anotaron 22 puntos en la zona pintada y 13 en jugadas de contra ataque.

De todas formas, el máximo anotador de los triunfadores fue Luke Hancock, quien salió de la banca y encestó los cinco triples que intentó y totalizó 22 puntos, opacando el impacto que había generado Spike Albrecht para los Wolverines, quien había convertido cinco disparos seguidos en la primera mitad -acabó con 17 tantos-.

La jugada: Con 5:09 por jugar en el partido, los jueces cobraron una falta a Trey Burke -líder anotador de Michigan, con 24 puntos-, quien presuntamente cometió infracción sobre Peyton Siva, en una acción que parecía ser una tapa totalmente limpia del base de los Wolverines. En ese momento, estos últimos perdían 67-64 e intentaban recuperar la ventaja. Nunca pudieron alcanzar a su oponente.

El dato: Rick Pitino, quien dirige a Louisville desde 2001, se convirtió en el primer entrenador que gana el título de básquetbol universitario con dos equipos diferentes. En 1996, había logrado el campeonato con Kentucky.

Un par de consideraciones adicionales: la rapidez con la que se movía el balón en gran parte de las posesiones y la alta efectividad de conversiones hicieron de ésta final en una con un ritmo y eficiencia ofensiva poco usual para la NCAA. Louisville encestó el 45% de sus intentos, en tanto que Michigan, a pesar de la derrota, convirtió el 52%. Otro ejemplo, fue el parcial de la segunda mitad, que dominada por los Cardinals, 45-38.

Por último, la grave lesión de Kevin Ware, quien estuvo presenciado en la banca la final, fue una motivación extra para los Cardinals en el Final Four. Coincidencia o no, debieron remontar en los dos partidos jugados en Atlanta. Y por si fuera poco, durante los festejos, bajaron el aro para que Ware pudiera cortar la red. Bonito gesto.

lunes, 1 de abril de 2013

Rumbo a Atlanta

El torneo de básquetbol universitario de Estados Unidos ya tiene a sus cuatro finalistas. Luego de cinco meses de competición en sus respectivas conferencias, de superar cuatro rondas de etapas de eliminación directa, haber cumplido con expectativas creadas en el entorno o, en otros casos, dando sorpresas provocando que muchos "brackets" de aficionados y especialistas terminaran siendo inútiles. Aquí, un vistazo a los equipos que competirán en el Final Four.

Louisville Cardinals. Entraron al torneo final como ganador del Big East y reafirmaron su condición de número uno, tras batir a North Carolina AT&T, Colorado State, Oregon y Duke en la región midwest. Son el único primer sembrado que sigue en carrera, por lo que lógicamente, cuentan con el favoritismo para llegar al título. Russ Smith (18.9 puntos por partido), Peyton Siva (9.9 puntos y 5.8 asistencias) y Gorgui Dieng (10.2 puntos y 9.5 rebotes) son sus principales jugadores, pero ahora, todas sus oraciones están con Kevin Ware, quien se rompió la pierna derecha en el duelo ante Duke. Reaparecen en la semifinal, luego de caer con Kentucky el año pasado. Van por su tercer campeonato, aunque el último lo consiguieron en 1986.

Wichita State Shockers. La gran sorpresa de este año. Clasificaron al torneo como noveno sembrado en la región west y se dieron el lujo de eliminar al primer y segundo clasificado (Gonzaga y Ohio State), en partidos definidos por seis puntos o menos, aparte de vencer a Pittsburgh y La Salle. Jugarán su primer Final Four y lo hacen teniendo una anotación muy balanceada. Destacan Cleanthony Early (13.7 puntos y 5.3 rebotes) y Carl Hall (12.5 puntos y 6.9 rebotes).

Michigan Wolverines. Reaparecen en el Final Four, luego de aquel equipo denominado como "Fab Five", que perdió la final de 1993. En esta ocasión, siendo cuarto sembrado en la región south, protagonizaron uno de los partidos más emotivos del torneo, al derrotar en prórroga a Kansas, quien era primer clasificado, aparte de vencer a South Dakota State, Virgina Commonwealth y Florida. Mucho ojo con Trey Burke (18.8 puntos y 6.8 asistencias), Tim Hardaway Jr. (14.6 puntos) y Glenn Robinson III (11.0 puntos y 5.5 rebotes). Éstos dos últimos se han encargado de demostrar que tienen mucho talento, más allá de ser hijos de las otrora figuras de la NBA.

Syracuse Orange. No importó que fueran el cuarto sembrado en la región east. Su defensiva zonal causó serios dolores de cabeza a Montana, California y a equipos mejor clasificados, como Indiana (1°) y Marquette (3°), a los cuales limitaron a menos de 33% de conversiones. El equipo naranja regresa al Final Four, luego de 10 años, instancia en la que lograron su único campeonato, encabezados por Carmelo Anthony, hoy estrella en los New York Knicks. Mucha atención con C.J. Fair (14.3 puntos, 7.0 rebotes), Brandon Triche (13.7 puntos) y Michael Carter Williams (12.1 puntos y 7.4 asistencias), principales referentes del actual conjunto.


Este sábado se disputarán las semifinales. A primera hora, Louisville enfrentará a Wichita State y de fondo, Michigan hará lo propio con Syracuse. Los ganadores de dichos encuentros se medirán el próximo lunes 8, en el partido por el campeonato. Georgia Dome será testigo del nuevo monarca.